Páginas

sábado, 8 de agosto de 2015

El miedo a sentir y otras cosas

Quizás esta sea una de las cosas más sinceras que haya escrito nunca. Normalmente yo no suelo desahogarme con nadie. No me gusta contar mis problemas, es algo que no me ayuda. Las personas tampoco colaboran, casi nadie está dispuesto a escuchar. Y mira, prefiero ahorrármelo cuando sé que no me van a prestar atención. A mí me gusta escuchar a los demás e intentar ayudarlos. Es algo que nunca me ha importado. Es más, me hace sentir bien poder animar en la medida de lo posible a alguien si está en mi mano hacerlo. Para mucha gente no es así, para ellos ya tienen bastante con lo suyo como para aguantar también lo tuyo. Totalmente comprensible, no seré yo quien diga que no. Prefiero escribir la verdad. Aquí me siento más a gusto.
Ahora bien, que algunos no vayamos mostrando nuestro dolor y no nos guste hablar de ello no significa que no tengamos lo nuestro. Ni siquiera pido comprensión, sólo que respeten mi silencio interno, que me dejen en paz, vaya. Es que hay demasiada gente tóxica por la vida y jamás entenderé el por qué. O siempre habrá gente que te juzgue o te pida explicaciones en cosas que no son de su incumbencia.
Puede que esté relacionado pero estos últimos años y sobre todo ahora, se está acentuando en mí algo que no me gusta nada pero que no puedo evitar. Se trata del miedo a sentir.
Noto que tengo una barrera que bloquea mis sentimientos. Es como que no me permitiera sentir según que cosas en según que circunstancias. Es algo perjudicial pero se trata de un mecanismo de autoprotección para evitar mayores daños. Ciertas circunstancias hacen que esté de esta forma, así que convivo con ello. El refuerzo constante y negativo por parte de algunas personas tampoco me lo pone fácil,
Encima coincide con que estoy en una etapa de mi vida muy existencialista preguntándome cosas del por qué de la vida y eso es como entrar en un laberinto sin salida.
Yo siempre he querido ilusionarme con alguien y ahora es algo que evito a toda costa. Me sigo ilusionando con muchas cosas porque pienso que a fin de cuentas esa es la esencia de la vida. El problema llega cuando ya no es como antes. A veces tengo que preocuparme de disfrutar en vez de hacerlo sin más.
Muchas veces no sé de dónde saco fuerzas pero simplemente pienso que te acostumbras a vivir así y ya está.
Puede que suene triste pero es como me siento y necesitaba liberarlo.